Arranca el tercer trimestre del embarazo, la fase final ha comenzado, vamos a conocer cómo crecerá el pequeño en estos meses que quedan. Y es que, en tan sólo tres meses, ya podrás tenerlo entre tus brazos.
Así, al comenzar el tercer trimestre del embarazo, en el séptimo mes, ya abre y cierra los ojos normalmente e incluso llora, ya que, cada vez está más receptivo a lo que nota a su alrededor como la luz o los sonidos. Se mueve muy a menudo, da pataditas y se estira. Por ello, es frecuente que veas marcado en tu barriga, su pie o su codo, ya que parece que está haciéndose hueco en este espacio que cada vez se le está quedando más pequeño. En este punto, si naciera y por tanto fuera sietemesino, sí que podría sobrevivir, aunque con cuidados intensivos. Ya mide unos 40 centímetros y ha superado el kilo, aproximadamente, 1.200 gramos.
Y casi sin darte cuenta te verás inmersa en el octavo mes, momento en el que ya se han formado prácticamente todos los órganos del bebé y comienza a aumentar de tamaño. El cerebro sigue su trascurso de desarrollo acelerado. Por otro lado, los huesos van endureciéndose, aunque su cabeza seguirá siendo blanda de cara a que sea más fácil su salida por el canal vaginal. Sigue moviéndose y cada vez con mayor intensidad, ya que es más grande. Sus pulmones aún no están del todo preparados. En cuanto a su medida, parece increíble que ya haya llegado más o menos a los 45 centímetros y que por norma general pueda llegar a pesar dos kilos y medio.
Y finalmente llega el noveno mes, cuando todo llega a su fin y momento en el que los futuros padres estarán ya nerviosos y deseosos por verle la carita en directo a ese pequeño que ha ido creciendo en la barriguita de la mamá.
De este modo, el bebé sigue aumentando de peso y tomando fuerzas para su salida. Normalmente puede que gane unos 250 gramos más. Ya en este punto sí que están preparados sus pulmones, han madurado y al nacer, no necesitará ayuda alguna para respirar.
El tercer trimestre del embarazo ha terminado.
En cuanto al espacio, se siente demasiado incómodo y le cuesta hacer sus movimientos como antes. Por ello, y buscando su propia comodidad, se coloca con la cabeza hacia abajo, posición indicada e ideal para el parto. Su piel se va volviendo más rosada. Ya tiene el mismo aspecto que tendrá cuando nazca. Normalmente suele medir en torno a los 50 cm e incluso quizás supere los 3 kilos de peso.
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