Ahora que ya has elegido la silla o carrito para vuestro peque, hay que acomodar su interior para que los paseos le resulten al niño lo más cómodo posible.
Los tejidos de las sillas están preparados para durar mucho tiempo. Por lo general es un material muy resistente, de fácil limpieza y en la mayoría de las ocasiones desenfundable. Esto en principio parece suficiente para llevar al niño pero si quitas la tapicería cada vez que utilizas la silla, esta no las a poder utilizar hasta que se seque.
Lo más aconsejado, tanto por higiene como por practicidad, es utilizar una funda que proteja la silla y evite el contacto directo de la silla con la delicada piel del niño.
Complementos para la silla de paseo
¿Un complemento para cada estación del año? Así es. Lo mismo que nosotros no utilizamos los mismos tejidos en verano que en invierno, lo mismo ocurre con los niños.
Durante el verano vas a combinar diferentes colchonetas. No te quedes sólo con una, vas a necesitar más. En verano ya sabemos que hace mucho calor y los niños lo sufren también. Incluso a veces parece que más cuando les levantas de la silla y ves su espaldita mojada. Actualmente hay unas colchonetas en tejido Microfresh , ocurre lo mismo que con la ropa de hacer deporte, de fácil secado. Además en su interior lleva tejido 3D para favorecer la transpiración.
Lo mínimo sería preparar una colchoneta de estas características para los días más calurosos y otra en tejido piqué para cuando lleves a tu peque más arregladito.
Durante el invierno el saco del carrito es la mejor solución. Por un lado proteges la silla y por el otro da calor al niño. Lo mismo que las colchonetas, aquí al menos te interesa preparar 2 sacos de silla. Uno con tejido todo tiempo y el otro con tejido polar para los días de más frío.
