No tener en cuenta el estilo comunicativo que se tiene con los hijos puede crear una brecha emocional demasiado grande entre padres e hijos. A veces pasan los días y no nos damos cuenta de la importancia que tiene estar bien y poder tener una comunicación con hijos sana y acertada. Hay errores de comunicación que debes evitarse desde que los hijos son pequeños.
Para que valores si tienes una buena comunicación con tus hijos o para que valores si deberías mejorar algunos aspectos, a continuación te voy a hablar sobre algunos errores de comunicación que se suelen cometer en las familias. De este modo si te ves reflejado en alguno de estos errores, podrás tomar medidas lo antes posible para que la brecha emocional que os está separando no se haga más grande.
Vivir en el pasado
Vivir en el pasado es revolver aquello que sucedió hace tiempo y que se menciona una y otra vez. Mencionar todo el tiempo algo que ocurrió no lo va a arreglar, es mejor hablar de soluciones en lugar de incidir en los problemas. Daros la oportunidad de aprender de los errores en lugar de quedaros anclados en ellos.
No ayudar a los hijos a resolver los problemas
Si dejas que tus hijos solucionen solos sus problemas sin ayudarles o guiarles, no te quejes después si el camino que han tomado no era el correcto. Además, los hijos pueden pensar que tú no tienes ningún control en sus vidas o lo que es peor, que no pueden confiar en ti. Si tu hijo tiene un problema, debes ser su guía y su apoyo incondicional.
Usar amenazas
Las amenazas nunca funcionan, y si las usas tus hijos solo se sentirán impotentes y resentidos hacia vosotros. Es mejor buscar soluciones de forma constructiva que amenazar para “conseguir” de forma “fácil” lo que quieres que tus hijos hagan. Pídeles opinión y buscar mejores formas para hacer las cosas.
Usar la mentira
No importa cómo de tentador puede ser inventar mentiras para evitar hablar de temas incómodos, simplemente no se debe mentir. Si mientes después no te sorprendas si tus hijos no son honestos contigo. Si mientes los niños simplemente lo sabrán, aunque no te lo digan, y lo que es peor, desconfiarán de ti.
Negar los sentimientos de los niños
Si no haces caso de los sentimientos de tus hijos, ellos pensarán que no son importantes. Si tu hijo se siente contento, triste o con cualquier otra emoción se debe priorizar y hablar de ello. Como padres tendréis que mostrar a los hijos la comprensión de los sentimientos, si no lo haces, los niños se sentirán incomprendidos.
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