Si te has quedado recientemente embarazada o estás pensando en tener un hijo, es importante que te informes perfectamente de los diferentes tipos de partos que existen. De esta forma tendrás la información suficiente a la hora de dar a luz a tu pequeño.
A continuación te contaré de una manera mucho más detallada las clases de parto que hay, para ayudarte a despejar las posibles dudas que tengas.
Parto natural
Como se indica en el nombre, en este parto la mujer da a luz de una forma natural sin la ayuda de ningún tipo de medicamentos. La mujer es la que decide la postura en la que desea dar a luz para que le resulte más cómodo a la hora del alumbramiento. Una forma muy popular de dar a luz consiste en el llamado parto acuático. En este tipo de parto el dolor es mucho menor y la madre tiene muchas más facilidad a la hora de tener al pequeño.
Parto prematuro
Este tipo de parto se suele dar en un tanto por ciento muy bajo entre las mujeres embarazadas y se produce antes de tiempo, concretamente entre las semanas 28 y 37 del embarazo. El peligro en este tipo de parto es que las probabilidades de que fallezca el bebé son mucho mayores que en un parto normal.
Además de ello, puede nacer con diferentes problemas de salud como retraso mental, parálisis cerebral o problemas de aprendizaje. En cuanto a los factores más comunes que pueden provocar que se produzca este tipo de parto están los malos hábitos de la madre como la ingesta de alcohol o de tabaco, sobrepeso o exceso de estrés.
Parto inducido
Este tipo de parto es provocado antes de tiempo y se debe a diferentes causas. Una de ellas puede ser la mala salud de la madre lo que puede suponer un auténtico riesgo para la vida del feto. Otra de las causas más comunes de dicha inducción puede deberse a una prolongación excesiva en las semanas de gestación.
Si se superan las 42 semanas de embarazo, el bebé corre el riesgo de sufrir graves problemas de salud por lo que la mejor opción es provocar el parto. En el caso de que la mujer haya sufrido anteriormente un parto prematuro puede provocar que el médico decida que lo más conveniente es inducirle el parto.
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